Itinerario - Tanzania: desde el Kilimanjaro hasta las playas de Zanzíbar

Los vuelos aéreos ida/vuelta desde España no están incluidos en el viaje, por lo que puedes decidir desde qué aeropuerto salir, a qué hora y con la compañía aérea que prefieras... ¡Esto es para darte la máxima libertad de elección!

Check-in en el hotel de Arusha, ¡Descubre cómo funciona el encuentro! Comenzaremos inmediatamente el Safari,  que en suajili significa viaje, encontrándonos en el corazón del continente africano! La primera visión en Tanzania es digna de un amor a primera vista: ante nuestros ojos encontramos el Kilimanjaro, uno de los picos más majestuosos y simbólicos del planeta, que con sus 5.895 m es también la montaña más alta de toda África.

Nos reunimos con nuestro guía y nos subimos a nuestros jeeps: ¡es hora de safari! ¡La primera parada es el reino de los grandes elefantes africanos: el Parque Nacional Tarangire. Este parque representa uno de los paisajes más singulares de Tanzania, aquí, en la época seca, el río Tarangire ofrece agua potable a numerosas especies de animales, como cebras, ñus, gacelas, antílopes, búfalos y grandes depredadores, ¡uno de ellos es el león! Pero lo que principalmente puebla este parque son los elefantes, que deambulan entre la vegetación compuesta también por algunas espectaculares y majestuosas especies de baobab.

Tras despertarnos, montamos en nuestro jeep y nos aventuramos en un safari al parque nacional del Lago Manyara; ¡Gran recipiente con agua y postal perfecta para el próximo salvapantallas de tu PC! La imagen de miles de flamencos rosados en el lago es realmente algo que te dejará sin aliento y, además de ellos, tendremos la oportunidad de observar más de 400 especies diferentes de aves, jirafas, elefantes, hipopótamos, cebras, ñus, pero sobre todo esta es la casa de los babuinos. Justo aquí se encuentra el lugar con mayor concentración de esta especie de mono en el mundo.

Después del almuerzo, nos dirigimos al pueblo de Mto Wa Mbu, donde tendremos la oportunidad de explorar y experimentar la cultura local, tal vez a bordo de una bicicleta, y conoceremos las sonrisas de la población dentro de un pueblo Maasai y aprenderemos algo nuevo en una escuela local de niños. ¡Estamos seguros de que será uno de los momentos más emocionantes del viaje! ¡Por la noche regresamos a nuestro albergue y nos damos un capricho con un chapuzón en la piscina.

Temprano suena la alarma, nos subimos a nuestros jeeps y nos dirigimos hacia el parque principal de esta aventura: ¡el Serengeti. Ahora sólo tenemos un objetivo en mente: ¡en busca de los cinco grandes (elefante, león, leopardo, rinoceronte y búfalo)!

Tras un día intenso buscando la toma perfecta con nuestra cámara, pasamos la tarde en el que será, durante las próximas dos noches, nuestro refugio en medio de la sabana, donde las estrellas aparecen mucho más brillantes de lo esperado.

Se dice que el Parque Nacional del Serengeti fue el parque que inspiró a Disney para la creación del Rey León y, como en los dibujos animados, también seguiremos el ritmo del día con el avance del sol. Pondremos la alarma al amanecer y pasaremos un día completo de safari por todo el parque, que alberga un ecosistema compuesto por innumerables especies de animales, como leones, jirafas, elefantes, hipopótamos, leopardos, más de 250.000 cebras y más 1,5 millones de ñus, que, aquí mismo, siguiendo el avance de la temporada de lluvias, realizan su gran migración.

Al final del día, quizás después de haber logrado ver finalmente a los Cinco Grandes, disfrutaremos de los colores del sol poniente en estas infinitas extensiones de tierra, para luego pasar la noche bajo las estrellas en nuestro alojamiento. ¿Quién sabe si Mufasa también aparecerá allí? :)

Aún a bordo de nuestros jeeps, nos alejamos del Serengeti, pero no sin haber pasado primero por los Gol Kopjes, ¡famosas rocas donde viven la mayoría de los leopardos del parque! Nos espera un camino lleno de escenarios verdaderamente únicos.

Regresamos a Karatu, donde podremos disfrutar de un poco de relajación y de unos chapuzones en la piscina del interior de nuestra estructura, completamente inmersos en la naturaleza africana. La velada también estará basada en la tranquilidad y en disfrutar de los sonidos de la naturaleza que nos rodea, ¡obviamente no sin tener la barriga llena!

No, no te asustes por el título, pero te sorprenderá la belleza del cráter Ngorongoro, declarado patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, así como la caldera volcánica intacta más grande que queda en el mundo. De hecho, con sus 265 kilómetros cuadrados, este volcán inactivo alberga a más de 25.000 animales de gran tamaño, entre ellos cebras, leones, elefantes, búfalos, hienas, chacales, hipopótamos, babuinos, guepardos, pero sobre todo el rinoceronte negro, una especie de que estima la existencia de sólo unos 500 seres en el mundo. ¿Tendremos la suerte de conocer uno?

Después de haber almorzado frente a los abrevaderos de Ngoitokitok Springs, en compañía de algunos hipopótamos (¡cuidado con que no te roben el almuerzo!), continuaremos nuestro safari dentro del cráter, en plena relajación, como el uno que los animales viven dentro de este paraíso terrenal. A continuación, tras una parada panorámica desde la cima del cráter, por la tarde nos dirigimos hacia nuestro alojamiento.

Nos levantamos temprano y nos dirigimos a visitar uno de los pueblos más particulares de la zona, el de los Hadzabe, una tribu de bosquimanos que vive de los cultivos y la caza local, con la única ayuda de arcos y flechas, ¡como si el tiempo se hubiera detenido de repente!

Tras realizar la actividad prevista con la tribu local, concluimos nuestros días de safari con una visita a la zona del parque del lago Eyasi, para luego dirigirnos hacia el monte Kilimanjaro, desde donde, por la tarde, ¡nos espera el vuelo a Zanzíbar!

¿Has soñado con sumergirte en aguas cristalinas y tomar el sol en playas de fina arena blanca? No estás soñando, es la realidad. Aquí habrá oportunidad de estar juntos jugando en la playa, relajarse, o tal vez aventurarse nuevamente, pero esta vez en el agua, con un poco de snorkel (para no perder la costumbre!).

El fenómeno de las mareas en Zanzíbar es muy activo, tanto que, dependiendo de ellas, es posible o no llegar a pie a la playa de Nungwi, otro lugar paradisíaco, donde por la noche se llena de gente dispuesta a salir de fiesta. ¿Qué cócteles pides?

Nos levantamos y salimos a pasar un día en el mar. De hecho, la primera parada será un paseo en barco por el archipiélago de la isla de Mnemba. Aquí además de tener la oportunidad de nadar con varios grupos de delfines, se encuentra uno de los arrecifes de coral más hermosos de la isla, donde tendremos la oportunidad de hacer snorkel y explorar el colorido fondo marino, pero lamentablemente sin poder desembarcar. ¿Por qué? El atolón de la isla de Mnemba es propiedad privada de Bill Gates, que recibió la concesión directamente del gobierno de Zanzíbar. Nada mal para una casa de vacaciones.

Nos dirigimos más al sur y hacemos una parada obligatoria en el famosísimo restaurante The Rock, que está construido sobre una roca y, dependiendo de la marea, se puede llegar a pie directamente desde la playa, en lugar de en barco. Hay que tener cuidado de no quedarnos atrapados allí :) Por la tarde regresamos a nuestro alojamiento en Kendwa.

¡Este día está dedicado al tiempo libre! Podemos jugar en la playa, nadar, hacer snorkel o hacer lo que podamos para coger un poco de color y volver lo suficientemente bronceados como para dar envidia a todos nuestros amigos :)

¿Conoces los colores del spritz aperol? Imagínalos en la realidad, cuando seremos acunados por las olas del mar al atardecer a bordo de un dhow, el velero típico de la isla. La vista del sol mirando al mar hará que todo sea más mágico. Por la noche nos cambiamos y salimos a divertirnos a alguna discoteca de la zona, ¿o por qué no? ¡a una fiesta en la playa!

La mañana la dedicaremos a recuperarnos del mal trauma de tener que salir de esta paradisíaca playa :) Después del almuerzo saldremos y llegaremos a Stone Town, antigua capital de la isla y corazón palpitante de todas las actividades diarias de la población. Aquí nos perderemos entre los aromas del mercado de especias, para luego pasear por el Palacio de las Maravillas, los baños persas, algunas mezquitas y el fuerte árabe. De hecho, la influencia del sultán y su reino aquí caracteriza a toda la ciudad, prevaleciendo sobre la cultura swahili, a la que Zanzíbar se unió con la unificación con la República de Tanzania en 1964.

Desayunamos y comenzamos nuestro último día en Zanzíbar explorando dos de las perlas del océano Índico que se encuentran justo frente a la costa oeste de la isla de Zanzíbar: Prison Island y Nakupenda. El primero, como su nombre indica, se creó en 1800 para albergar una prisión para esclavos indisciplinados, pero nunca se utilizó y, en cambio, se convirtió en hospital en los años siguientes. Su animal simbólico, además de huésped, es la tortuga gigante, traída aquí en el siglo XIX y cuyos ejemplares pueden alcanzar hasta 250 kg de peso y 200 años de edad. ¡Tendrán muchas historias que contarnos! La segunda, sin embargo, más que una isla, es una franja de tierra en medio del mar y se llama Nakupenda, que en el idioma local significa te amo. No tiene sentido revelar el porqué de este nombre, ¡será amor a primera vista!

Regresamos a Stone Town y esta vez podremos disfrutar de celebraciones y saludos hasta altas horas de la noche. ¿Eres de los que suelta fácilmente las lágrimas de despedida o prefieres disfrutar con una copa durante una noche interminable?

Antes de tomar el vuelo de regreso a casa, toca hacer balance de nuestra aventura africana. ¿Cuántos animales logramos ver? Pero, sobre todo, ¿cuántas emociones nos dejó este viaje? Es hora de despedirse: ¡nos vemos en la próxima aventura WeRoad!