Los vuelos a/desde España no están incluidos en el paquete, por lo que podrás decidir desde dónde salir, a qué hora y con qué compañía aérea prefieres... ¡Lo hacemos así para darte la máxima libertad de elección!

Check-in en el hotel de Bangkok y reunión de bienvenida.

¿Qué mejor manera de conocerse que con una sabrosa comida tailandesa? Brindemos todos juntos por el comienzo de esta aventura. Continuamos la tarde en la zona de Khao San. Tailandia es famosa por muchas cosas, y una de ellas es sin duda su vida nocturna. Esta noche la probaremos dando un paseo por la famosa Khao San Road, un animado barrio lleno de bares y discotecas: ¡no será difícil encontrar un sitio para todos los gustos!

Después de la noche que acabamos de pasar, ¡estamos listos para que empiece la verdadera aventura! Hoy nos espera un vuelo que nos llevará de Bangkok a Chiang Rai, capital del extremo norte de este precioso país. Sin duda, una de las primeras cosas que hacer en Chiang Rai es explorar los templos de la ciudad: además del Templo Blanco, el Templo del Buda de Esmeralda y el Templo Azul, hay muchos templos pequeños esperando a ser descubiertos, ¡y tenemos tiempo de sobra para descubrir los menos conocidos!

Como toda ciudad asiática que se precie, Chiang Rai tiene su propio mercado nocturno y es el lugar más animado de la ciudad. Es un mercado frecuentado por turistas y lugareños, y entre sus puestos pasamos la noche. Podemos probar un riquísimo Khao Soi (una deliciosa sopa de curry con pollo y fideos) y después asistir a actuaciones musicales de grupos locales: ¡será una inmersión total en la cultura local!

Tras un rico desayuno, tomaremos un autobús localpara llegar a Chiang Mai, ciudad situada a orillas del río Ping: rica en templos y esculturas, nos sorprenderá por su belleza arquitectónica y sus mercados en el centro de la ciudad, donde comerciantes y artesanos intentan vender prácticamente... ¡de todo! Sin perder demasiado tiempo, nos embarcamos de inmediato en una visita a pie, acompañados por nuestro guía que nos introducirá en los secretos de la ciudad. El templo de Doi Suthep es una visita obligada: hay 300 escalones que conquistar, pero no estaremos solos: los dragones de piedra que decoran los escalones nos mostrarán el camino.

Después del cansancio, podemos regalarnos un masaje tradicional tailandés y recargar las pilas. Terminaremos el día en el mundialmente famoso mercado nocturno, donde podremos disfrutar de auténtica comida callejera tailandesa, que, por supuesto, será la cena de esta noche.

Hoy nos despedimos del asfalto y el caos de Chiang Mai para sumergirnos en la jungla tailandesa. Rodeados de vegetación, admiraremos la fauna local en un ambiente fresco y relajante. Después de vestir los trajes tradicionales karen, conoceremos a los elefantes tailandeses: podremos darles de comer, revolcarnos en el barro con sus crías y bañarnos todos juntos en el río. Una experiencia, con pleno respeto a la salud de los elefantes, que permanecerá en nuestros corazones para siempre.

Tras el almuerzo, nos despediremos de los elefantes y regresaremos a Chiang Mai. Esta tarde tenemos una misión que cumplir, empezando por... ¡el mercado! De hecho, aprenderemos a cocinar algunos platos típicos tailandeses: antes de empezar nuestra clase de cocina, sin embargo, necesitamos conseguir los ingredientes, ¡y el mercado es el lugar adecuado! Y por supuesto, después de cocinar... también seremos nosotros quienes probemos los platos que hemos preparado. ¡Así que será mejor que nos pongamos manos a la obra!

Salimos muy temprano porque tenemos por delante un viaje de seis horas para llegar a la antigua capital del reino, Sukhothai. Desde luego, el viaje no será aburrido: al otro lado de la ventanilla, los mágicos paisajes tailandeses nos harán compañía o será la ocasión perfecta para echar una cabezadita. Nada más llegar, para estirar las piernas después de tantas horas sentados, hacemos un bonito recorrido por la ciudad... de nuevo en bicicleta, que es la forma ideal de recorrer todo el sitio en largas distancias. Sukhothai es uno de los lugares más espectaculares de todo el país: un vasto complejo de templos, monasterios y estatuas tan bien conservados en el tiempo que dejan sin habla. Sukhothai significa "amanecer de la felicidad"... y felicidad y asombro es lo que sentiremos ante el misterioso Wat Sangkhawat, un conjunto de ruinas rodeadas de vegetación, o ante la majestuosidad de la estatua de Buda en Wat Si Chum, que nos hará sentir diminutos.

Después de un buen desayuno, cogemos un autobús privado desde Sukhothai hasta la estación de tren de Bangkok. Sin embargo, nos detendremos en la ruta para comer algo y tomar un descanso. Al llegar a la estación de tren de Bankok, tomaremos un tren nocturno hasta Chumphon, adonde llegaremos a la mañana siguiente; sí, hoy es un día de mucho trasbordo, pero créanos: ¡merecerá la pena!

Por la mañana cogemos un traslado al puerto y embarcamos hacia nuestro destino final: Koh Tao.

Nos esperan dos días de merecido relax en una de las islas más espectaculares de Tailandia.

Situada en el golfo de Tailandia, a una hora en barco de Koh Phangan, Koh Tao se ha hecho famosa por sus playas transparentes, su mar azul y su vegetación tropical. Por su belleza natural y sus singulares arrecifes de coral, Koh Tao ha sido elegida como destino perfecto por todos los amantes del submarinismo y de los deportes marinos en general, así que sin duda hay que ir preparando las aletas, las máscaras y el tubo, ¡porque realmente merece la pena!

¿Y por la noche? ¿Qué hacemos? Comienza con los bares que ponen música chill-out al atardecer mientras se toma una copa tumbado en la playa, y continúa con una o dos discotecas que tocan hasta las 2 de la madrugada: no está nada mal... ¡pero nunca es demasiado tarde en Koh Tao, porque al día siguiente hay que prepararse para bucear y todas las demás actividades!

Tras 2 maravillosos días de relax, buceo, natación y preciosas playas, disfrutamos de las últimas horas tomando el sol antes de despedirnos de Koh Tao. Después de darnos el último baño nos trasladamos al puerto donde tomamos el ferry hacia Chumphon; una vez allí nos trasladamos al hotel para recoger nuestras cosas. Después podremos relajarnos o explorar la ciudad.

Preparamos las mochilas y nos despedimos de Chumphon. Por la mañana llegaremos al aeropuerto, donde tomaremos nuestro vuelo a Bangkok, donde comenzó nuestro viaje. Después de tantos días inmersos en los paisajes naturales de Tailandia, no será fácil acostumbrar nuestros sentidos al caos de la capital, ¡pero lo intentaremos!

Siempre hay lugares en una ciudad que uno no debe perderse. Por eso, por la mañana daremos un paseo por los templos de Bangkok, empezando por el Palacio Real y siguiendo por Wat Pho, con su gigantesco Buda de oro reclinado, y Wat Arun, al otro lado del río -para llegar a él daremos un pequeño paseo en barco-. Conocido como el "Templo del Amanecer", posee una atmósfera atemporal que infunde una profunda paz.

Por la tarde tendremos tiempo libre y será una buena oportunidad para hacer algunas compras antes de volver a casa. Dependiendo del día que estemos aquí, también podemos acercarnos a algunos mercados locales; suelen ser los mejores lugares para comprar productos locales. Hacia el atardecer, volvemos al hotel para darnos una ducha rápida y prepararnos para nuestra última cena juntos: será nuestra última oportunidad de comer buena comida tailandesa (que nos habrá conquistado) y pasar tiempo juntos. El viaje fue intenso y volvemos a casa con la mochila llena de recuerdos, ¡brindando por todas las emociones vividas y compartidas!

Hemos llegado al final de esta aventura en tierras tailandesas: ¡nos despedimos y prometemos volver a vernos pronto para otro WeRoad!