El transporte hacia/hasta España no está incluido en el paquete, por lo que puedes decidir desde dónde salir, a qué hora y con la aerolínea o compañía marítima que prefieras. ¡Esto es para darte la máxima libertad de elección! Check-in en el hotel en Nápoles y reunión de bienvenida. Otra cosa no, pero en Nápoles, se come bien y mucho, y la gente es muy cercana. Combinando las tres cosas, la mejor manera de conocernos es frente a un plato de pasta y provola en los quartiere españoles, ¡el verdadero Nápoles! Con el estómago disfrutaremos de la vida nocturna de Nápoles aire libre, Chiaia con sus clubes y Mergellina con sus chalets en el paseo marítimo abiertos hasta el amanecer:

Comenzamos nuestra aventura en los mares de la región de Campania. Cuando salgamos del puerto de Nápoles a bordo del primer barco, podremos admirar toda su costa desde una perspectiva única hasta llegar a nuestro destino: la isla de Isquia. Después de disfrutar de un segundo desayuno con el famoso cruasán de Isquia, hecho con una mezcla de hojaldre y brioche, estamos listos para disfrutar de la isla más grande de las islas Flégreas, famosa por sus playas de color esmeralda.

¡Este día está dedicado a la relajación absoluta entre playas, comida local y aguas termales excavadas en las cuevas por los romanos en busca de un más que merecido descanso! Después de disfrutar de una siesta debajo de un árbol o tomar el sol en las playas más bonitas del golfo, regresamos a Nápoles para pasar otra noche de diversión.

EL primer dia de nuestro viaje será como retroceder 2.500 años. Después de haber recogido nuestros coches, nos dirigimos hacia las excavaciones de Herculano, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. A menudo eclipsado por la gran y abarrotada Pompeya, estas excavaciones están mejor conservadas y son una verdadera joya. Además evitaremos las masas de turistas y disfrutaremos de una verdadera ciudad romana, lo suficientemente intacta como para parecer que estamos en un set de película. Nos enamoraremos de sus calles llenas de mosaicos, pinturas, estatuas y patios, ¡tanto que no querremos irnos!

De 0 a 1.000: hablemos de los metros que recorreremos sin tapujos. Después de admirarlo desde lejos, subiremos por fin a la cima del volcán más famoso de Italia: ¡Su Majestad el Vesubio! Las emociones se apoderarán de nosotros mientras caminamos sobre la colada de lava de la última erupción de 1944, y una vez alcanzada la cima, por encima de los 1.000 metros, podremos disfrutar de una panorámica de 360 grados sobre toda Nápoles, la península sorrentina, las islas y la costa amalfitana. ¿Mucha belleza de golpe? ¡Y pensar que sólo estamos al principio del viaje! Después de un día tan intenso, nos podíamos beber unos buenos vinos de los viñedos situados en las laderas del volcán. ¡No puede haber mejor escenario! ¡Por nosotros y por este viaje! Esta noche pasaremos la noche fuera de la bulliciosa Nápoles, instalándonos en la península de Sorrento.

¿Listo para navegar y descubrir la isla más glamurosa de toda Italia? ¡Hoy vamos a Capri! Después de un refrescante baño, nos espera un paseo por las elegantes calles del centro histórico, entre un helado y un café. En este punto, podremos explorar libremente: están los majestuosos Faraglioni, que predominan imponentes en medio del mar; La Gruta Azul, donde el agua refleja un color azul profundo; y no olvidemos el Monte Solaro en Anacapri, al que se puede llegar cómodamente con un telesilla panorámico en los asientos suspendidos al vacío ... ¡Volvemos a Nápoles por la noche, donde nos esperan unos últimos días inolvidables!

Historia, mar y buena comida... ¿qué falta? La naturaleza, por supuesto, que por estos lares nunca deja de sorprender con los increíbles paisajes de la costa amalfitana. Tras levantarnos temprano y tomar un buen desayuno, llegamos a Agerola y aquí nos ponemos el calzado cómodo: nos espera una preciosa caminata acompañados de las estupendas vistas de esta parte de Italia. Lo que seguimos es el Sentiero degli Dei (Sendero de los Dioses), de Agerola a Positano, una ruta inmersa en el maquis mediterráneo que aún conserva su antiguo encanto. Comenzamos nuestra caminata a 600 metros sobre el nivel del mar y atravesamos pequeños pueblos inmersos en la naturaleza: para hacernos compañía está el mar, de un azul intenso, que nos invita a detenernos para retratarlo en toda su belleza.

Por la tarde podemos tomar un ferry de Positano a Amalfi, ¡porque no queremos perdernos nada de esta parte del mundo! Hoy hemos disfrutado plenamente de la belleza de la costa, estamos cansados, pero con el corazón lleno de asombro y belleza.

Hoy vamos a descubrir una de las costas más bonitas del Cilento, ¡si no la más bella! Dejaremos nuestros coches en Palinuro y embarcaremos en nuestro barco, un gozzo para ser precisos; este día será de relax y diversión. Nos acompañarán a descubrir la costa y las cuevas de este tramo de costa aún poco conocido pero sobre todo virgen: ¡el Cilento! Navegaremos y bucearemos en aguas cristalinas, y luego continuaremos nuestro día en la playa disfrutando del sol o, si todavía tienes energía después de lo de ayer, practicando algunos deportes acuáticos rodeados del fascinante paisaje de la maquia mediterránea. ¡Prepara las máscaras y el tubo! No te puedes perder esta experiencia.

Hoy volvemos al lugar donde empezó todo: ¡Nápoles! ¡Una ciudad única que será la protagonista indiscutible de este día! Comenzamos con algunos símbolos indiscutibles como el Cristo Velado y una visita a la Nápoles subterránea. Nápoles está hecha de callejuelas estrechas y sinuosas, y es a partir de ahí, en los Quartieri Spagnoli, donde descubriremos la Nápoles más auténtica: un caos geométrico, un laberinto de callejuelas que comienza en el siglo XVI y llega hasta nuestros días, revelando la vida cotidiana de las alfarerías, las coladas y la comida callejera, mezclándola con los rasgos artísticos que representan los rostros de quienes han representado a Nápoles y el modo de vida napolitano en todo el mundo. Y para terminar con broche de oro, ¿qué falta? Pues, por supuesto: nuestra última cena juntos, la última oportunidad de saciarnos de las delicias napolitanas, pero no nos pongamos demasiado tristes, recordemos que la noche es joven y que Nápoles ofrece unas vistas impresionantes, ¡incluso a estas horas!

¡Ha llegado el momento de la despedida! Nos vamos a casa, pero primero ... ¿Has dejado algo de espacio en tu mochila? No puedes irte de Campania sin la fogliatella, el babà, la pastiera, la mozzarella, el limoncello... ¡para que, cuando lleguemos a casa, sigamos recordando esta experiencia (vital y gastronómica)!