Los vuelos - y los traslados de entrada y salida - no están incluidos en el paquete, por lo que podrás decidir desde qué aeropuerto o estación salir, a qué hora y con el medio de transporte que prefieras. Esto es para darte la máxima libertad de elección. También se puede llegar a Nápoles en tren o autobús. Descubre cómo funciona el encuentro. 

Quedamos en el hotel a las 17:00 horas, tiempo justo para dejar las mochilas y conocernos mejor. Nuestro viaje comenzará desde el corazón de esta maravillosa ciudad renacentista. Para entrar inmediatamente en el ambiente florentino, disfrutaremos de un aperitivo tradicional toscano con embutidos y quesos acompañado de una buena copa de Chianti... ¡Esto es suficiente para sentirnos ya como auténticos florentinos!

¡Nos despertamos en Florencia y el día promete ser inolvidable! Salimos inmediatamente para tomar un desayuno rápido en uno de los muchos bares de la zona y ya estamos listos para sumergirnos en la belleza de esta ciudad única. Primera parada: Piazza del Duomo, el corazón palpitante de Florencia. Frente a nosotros se alza majestuosa la Catedral de Santa Maria dei Fiore, con su icónica Cúpula de Brunelleschi. No podemos resistir la tentación de subir a la cima para admirar la impresionante vista de la ciudad. A tiro de piedra, el Campanario de Giotto y el Baptisterio de San Giovanni, con sus puertas de bronce dorado entre las que destaca la famosa "Puerta del Paraíso": una auténtica inmersión en el Renacimiento que nos deja sin palabras.

De allí nos trasladamos a la Piazza della Signoria, donde la energía de la ciudad es contagiosa. El Palazzo Vecchio domina la plaza y la Loggia dei Lanzi nos encanta con sus esculturas renacentistas, en particular el Perseo con la cabeza de Medusa de Cellini. ¡Florencia es un museo al aire libre! Después de un almuerzo rápido, Ponte Vecchio nos llama para un paseo romántico. Cruzar este puente, con sus joyerías, es una experiencia que vale la pena vivir. Desde aquí nos dirigimos hacia el Palacio Pitti y los Jardines de Bóboli, donde nos relajaremos entre obras de arte y naturaleza, con el panorama de la ciudad como telón de fondo.

Por la tarde, nos desplazaremos hasta la Piazza Santa Croce, donde podremos visitar la Basílica de Santa Croce y rendir homenaje a grandes personalidades como Miguel Ángel y Galileo. La espiritualidad del lugar se mezcla con la grandeza del arte y la historia. Para terminar el día por todo lo alto, nos trasladamos a Via Gioberti para tomar un aperitivo. Entre una copa de vino toscano y una fuente de embutidos y quesos locales, brindamos por nuestra aventura florentina, listos para descubrir la vibrante vida nocturna de la ciudad. La noche nos espera, ¡Florencia nunca duerme!

¡Hoy nos espera una inmersión total en el arte y las tradiciones de Florencia! Empezamos el día con una de las obras más famosas del mundo: el David de Miguel Ángel, que podemos admirar en todo su esplendor en la Galería de la Academia. Es imposible no quedar fascinado por la perfección de los detalles, símbolo de fuerza y belleza que ha marcado la Historia del Arte. Después de tanto caminar, llega el momento de recargar pilas con un ligero almuerzo florentino. Paramos para degustar la comida callejera por excelencia, conocida en todo el mundo: ¡la comida toscana! Una experiencia auténtica, para saborear en una de las tiendas históricas de la ciudad, entre un bocado y una charla con los lugareños.

Por la tarde subimos a Piazzale Michelangelo: la vista desde aquí es simplemente impresionante; Florencia se encuentra a nuestros pies, con los tejados rojos, el Duomo y el río Arno, que nos enamoran aun más de esta ciudad. Antes de concluir nuestro viaje, nos sumergimos en el Barrio de Oltrarno y la animada zona de Santo Spirito. Aquí se respira la Florencia más auténtica: artesanos que trabajan la madera y el cuero, pequeñas trattorias donde el tiempo parece haberse detenido, y bares frecuentados por florentinos. Disfrutamos de los últimos momentos del día con un paseo entre las tiendas y quizás una copa de vino para despedirnos de Florencia, la ciudad que nos hizo soñar.

Nuestro viaje termina a las 5 de la tarde, ¡pero el recuerdo de este día permanecerá con nosotros para siempre!